sábado, 18 de agosto de 2012

La peluquería

Odio las peluquerías.

De toda la vida me he cortado el pelo en casa. Primero mi padre nos lo cortaba a todos. Cuando fui creciendo y ya no llevaba el pelo cortito, empezó a cortármelo mi madre. Cuando empecé a ser arisca y enfadarme cada vez que me lo cortaba porque no era como yo quería, empecé a cortármelo yo. Como ya no podía enfadarme con nadie, pues me aguantaba.

Mis experiencias en las peluquerías han sido todas malas. Es que no recuerdo una sola que se salve. La penúltima fue hace 2 años, para la boda de mis suegros. Fui un mes antes de la boda (por si salía mal tener tiempo para remediarlo) a darme mechas, para iluminar un poco... Le pedí mechas castañas. Pero su castaño y mi castaño no debían ser lo mismo, porque me las puso rubias. Tan rubias, que cuando me vi, ella me vio, y se me descompuso la cara... a ella se le descompuso más. Cómo sería para que me dijera... puedes venir cuando quieras a que te las matice. Solo la miré, pagué y me fui.

Juré que sería la última, pero hace unos meses tenía ya unas greñas importantes, así que me fui a la peluquería del Corte Inglés, que como el cliente siempre tiene la razón pensé que me entenderían. Pedí que me cortasen las puntas, creyendo que iba a ocurrir lo que me había pasado siempre, que vas con el pelo a la altura del escote, le dices córtame un poquito las puntas y sales con el pelo por debajo de la oreja. Pero sorprendentemente sólo me cortó las puntas... así que fui para nada, porque ni se me notó. Además le dije que me lo hiciese a capas y me lo dejó recto, que tuve que buscar yo luego un video en youtube nada más llegar a casa y hacerme las capas yo (http://www.youtube.com/watch?v=HbhLznbUqpI, ella ya lo tiene a capas antes de hacérselo, pero bueno, a mi me ha servido en muchas ocasiones este vídeo...).

Y ayer repetí. Pero esta vez ha sido algo más radical. Creí que en Pío los peluqueros serían... no sé, como muy cools, por la zona más que nada. No es que el corte que me he hecho necesitara que lo fueran, pero yo lo quería así, pensando en que entenderían mejor lo que quería, que no lo tenia claro al 100% ni yo. Se me desencajó la cara de tal manera al pararme en la entrada y ver que no había ni un moderno que ya me estaba arrepintiendo de haber ido.

Pero me vieron, y no había ningún cliente más, así que poco más o menos se avalanzaron sobre mí, me plantaron la bata y fue todo tan tan tan rápido que cuando quise reaccionar me estaban lavando el pelo, César ya no estaba a mi lado y yo ya no podía huir... Tres minutos después estaba ya sentada para cortarme y buscando a César con la mirada, histérica, hiperventilando. El peluquero me preguntó que qué quería y le he enseñé las tres fotos que llevaba. Muy parecidas a mí, todas. ¿No hay morenas con cortes así?

Y le quise explicar, pero antes de terminar de decirle... como ésta pero mas corto por aquí, como ésta pero más largo por allá  y que me quede más o menos como a ésta, él había pegado el primer tijeretazo. Se me cortó la respiración, y me quedé con la boca abierta en una frase a medio terminar. Mi pelo. Está encima de la mesa. Ay... Ay, no...

Me duele. No sé el qué, pero algo me duele.

Al menos 25 centímetros de pelo liso, hecho un churro mojado, ahí, delante de mí.  

Qué...

He...

Hecho...

La siguiente vez que entró aire en mis pulmones fue aire caliente... el tío estaba ya dándome con el secador.

En estado de shock me levanté, murmuré algo así como puedo quitarme ya esto? refiriendome a la bata y a los kilos de pelos que tenía por encima de las piernas, y sin mirarme al espejo fui a pagar. Me preguntó si quería llevarme mi pelo. (...). Silencio incómodo. Es posible que se me escapase un gruñido, así que como encima me estaba dando el tick en el párpado y no contesté, creo que me entendió, porque se dio la vuelta y se fue.

Nada más salir fui a echarme el pelo a un lado, una manía que tengo. Tenía. Porque ya no hay pelo...


Y ésta soy yo a partir de ahora...

2 comentarios:

  1. Si te digo que el nuevo peinado te queda muy bien igual se enfada tu novio, así que no diré nada. Jeje.

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